El absentismo laboral se ha consolidado como uno de los mayores desafíos económicos y organizativos en España, con un coste que supera los 47.000 millones de euros anuales. Ante esta realidad, Vivofácil (empresa de asistencia privada especializada en el cuidado de personas de cualquier edad, en casa y en cualquier lugar donde se encuentren) ha desarrollado una metodología propia para reducir significativamente este fenómeno mediante un enfoque integral estructurado en tres fases: diagnóstico, plan preventivo y sistema de seguimiento.
La propuesta se apoya en la experiencia acumulada durante más de 25 años por la compañía en el ámbito del cuidado de personas, que le ha permitido atender a más de 10 millones de usuarios en España y Portugal. A través de su modelo, la organización busca no solo reducir el número de ausencias, sino también mejorar el clima laboral, fidelizar el talento e incrementar la rentabilidad empresarial.
Juan José Muriel, CEO de Vivofácil explica que “nuestro modelo permite actuar antes, durante y después de la ausencia. Es una solución diseñada no para castigar, sino para cuidar. Y cuando las personas se sienten acompañadas, las empresas funcionan mejor y aumentan su productividad”.
La primera fase del modelo consiste en un diagnóstico exhaustivo de la situación del absentismo dentro de la organización. Esta etapa incluye tanto el análisis cuantitativo de indicadores (como la duración media de las bajas o los departamentos más afectados) como un enfoque cualitativo, basado en entrevistas y encuestas. Este estudio permite identificar causas estructurales y colectivos de riesgo, elementos clave para diseñar intervenciones eficaces y adaptadas a la realidad de cada empresa.
En la segunda etapa, a partir de los resultados del diagnóstico, se establece un plan preventivo personalizado. Las medidas pueden incluir: programas de salud física y mental, apoyo psicológico, servicios de conciliación personal y familiar, asesoramiento legal en situaciones críticas o incluso modificaciones organizativas que ayuden a favorecer la permanencia en el puesto de trabajo. El objetivo es anticiparse a las causas del absentismo y mitigarlas antes de que deriven en una baja laboral.
La tercera fase corresponde a la implantación de un sistema de seguimiento, que permite controlar en tiempo real la evolución del absentismo. El sistema registra cada intervención, analiza indicadores clave y emite informes periódicos para las empresas. Este enfoque ofrece una gestión basada en datos, con trazabilidad completa y capacidad de ajuste en función de los resultados observados.
Vivofácil subraya que el objetivo no es únicamente reducir el número de bajas, sino alinear la gestión del bienestar del trabajador con los objetivos estratégicos de la empresa. De este modo, el modelo no solo tiene un impacto directo en la reducción de costes asociados a ausencias, sino que contribuye a crear entornos laborales más estables y comprometidos.
Cada vez más organizaciones están optando por dejar atrás modelos de control reactivo, en favor de estrategias preventivas que tratan el absentismo como una palanca de competitividad y sostenibilidad. El enfoque de Vivofácil se inserta en esta tendencia, ofreciendo una solución estructurada y medible que refuerza tanto el compromiso interno como la eficacia operativa.