Marc Sureda
La inteligencia artificial (IA) continúa liderando la transformación digital, pero las empresas deben adoptar un enfoque crítico para garantizar que las soluciones basadas en IA generen beneficios reales, explican desde Retarus, proveedor internacional de comunicaciones seguras y de alto rendimiento para procesos críticos de negocio, cuyos expertos han identificado cuatro tendencias principales que contribuirán a mejorar la comunicación comercial digital en los próximos años.
La clave, según siguen explicando desde dicha compañía, estará en evaluar de forma exhaustiva los casos de uso que se ajusten a las necesidades específicas de cada negocio, integrando esta tecnología únicamente cuando aporte un valor añadido significativo a las comunicaciones empresariales.
Automatización para procesos críticos
La presión sobre los márgenes y la escasez global de personal cualificado están impulsando la adopción de tecnologías de automatización en las comunicaciones críticas. Esto abarca desde la digitalización global de procesos hasta el uso de API y tecnologías en la nube que permitan transformar datos no estructurados en formatos más manejables. Estas iniciativas no solo aumentan la eficiencia, sino que también reducen costes, posicionando a las empresas para mantener su competitividad a largo plazo.
Un ejemplo práctico es la migración de sistemas tradicionales como el fax, hacia soluciones basadas en la nube, donde se integran herramientas de captura y análisis automatizado de datos.
Seguridad frente a ciberamenazas
La creciente sofisticación de los ciberdelincuentes obliga a las empresas a revisar continuamente sus estrategias de ciberseguridad. En este contexto, las soluciones de mensajería empresarial necesitan evolucionar, ofreciendo no solo cifrado avanzado y opciones de archivado flexibles, sino también herramientas analíticas que permitan a los equipos de TI monitorizar y gestionar a tiempo real las comunicaciones críticas.
Una característica esencial será la incorporación de soluciones de continuidad del correo electrónico, asegurando que las comunicaciones no se interrumpan incluso durante incidentes de seguridad.
Complejidad de los entornos híbridos
La transición hacia la nube plantea importantes desafíos, especialmente en empresas que gestionan sistemas dispersos, heterogéneos o parcialmente obsoletos. La administración de infraestructuras híbridas requiere tecnologías que no solo sean fiables, sino que también garanticen la funcionalidad en distintas categorías de correo electrónico, desde el marketing automatizado hasta el tráfico transaccional.
La integración de funciones avanzadas como el enrutamiento inteligente y la gestión del tráfico será fundamental para garantizar un rendimiento óptimo y mantener la continuidad operativa.
Cumplimiento normativo como eje central
Las regulaciones como NIS 2, DORA o la Ley Europea de Servicios Digitales (DSA) imponen a las empresas la necesidad de gestionar sus comunicaciones empresariales con altos niveles de transparencia, control y seguridad. Esto incluye desde el cumplimiento de la facturación electrónica hasta la adopción de acuerdos de nivel de servicio (SLA) que aseguren la fiabilidad de las infraestructuras.
Cumplir con estas normativas no solo es esencial para la protección de los datos, sino que también establece una base sólida para la adopción de nuevas tecnologías, reforzando la confianza y la gobernanza en el ecosistema digital.
