Red Hat consolida un ecosistema estratégico para acelerar la transición hacia vehículos definidos por software

La firma impulsa un modelo colaborativo con actores clave del sector tecnológico y automotriz para integrar su sistema operativo Red Hat In-Vehicle Operating System en plataformas de próxima generación.

Red Hat ha anunciado la creación de un ecosistema de partners tecnológicos y automotrices enfocado en el desarrollo de vehículos definidos por software, en torno a su plataforma Red Hat In-Vehicle Operating System. Esta iniciativa busca preintegrar componentes de hardware, middleware y software dentro del sistema operativo para vehículos, ofreciendo así una arquitectura lista para ser adoptada por fabricantes y proveedores del sector.

El objetivo es responder a la transformación que vive actualmente la industria automotriz, marcada por el paso de arquitecturas basadas en hardware hacia entornos definidos por software. Este cambio exige colaboraciones más integradas entre proveedores de silicio, desarrolladores de software, integradores de sistemas y fabricantes de equipos originales (OEM), todos alineados en torno a plataformas abiertas y modulares.

Red Hat pretende que su sistema operativo actúe como base común para estos desarrollos, aportando: portabilidad, flexibilidad y seguridad funcional en contextos de criticidad mixta. La propuesta se alinea con la necesidad del sector de reducir tiempos de diseño, acelerar ciclos de prueba y mejorar las capacidades de integración, en un entorno regulado y de alta exigencia técnica.

La compañía ha establecido alianzas con actores relevantes en toda la cadena de valor automotriz. Entre los socios se encuentran fabricantes de chips, como Intel, Arm, NXP, Texas Instruments y ThunderX. Los fabricantes trabajan junto a Red Hat para asegurar la compatibilidad del sistema operativo con distintas arquitecturas de silicio, permitiendo así una mayor portabilidad y aprovechamiento de características específicas del hardware.

Así mismo, Red Hat colabora con empresas de middleware como LG Electronics, Qt Group y Qorix, cuyas soluciones permiten facilitar la ejecución de aplicaciones críticas sobre la plataforma. Este componente resulta esencial para mantener la estabilidad y flexibilidad de las funciones que corren en el vehículo, especialmente en contextos de seguridad y tiempo real.

La integración también se extiende a los sistemas embebidos y servicios de ingeniería, con la participación de firmas como Tech Mahindra, DXC Technology y Sonatus, que incorporan Red Hat In-Vehicle Operating System en arquitecturas más amplias orientadas a vehículos autónomos, conectividad y nuevas experiencias de usuario final.

Red Hat ha comunicado la obtención de su primera certificación de seguridad funcional para Red Hat In-Vehicle Operating System, centrada en el nivel ASIL-B, un estándar clave en los sistemas automotrices críticos. Esta validación ha sido destacada por socios como ETAS, NXP y TI, que subrayan la importancia de cumplir con los requisitos de seguridad en un entorno cada vez más exigente.

Además, se están desarrollando casos de uso en software para conducción autónoma gracias a la colaboración con la Autoware Foundation y TIER IV, que ya ejecutan su stack abierto sobre la plataforma de Red Hat. Esta referencia abre nuevas oportunidades para aplicaciones de movilidad avanzada, con una base que facilita la interoperabilidad y el cumplimiento de los estándares del sector.

La compañía busca, con este ecosistema, establecer una base tecnológica preparada para escalar junto a las necesidades del mercado, promoviendo la adopción de soluciones abiertas en un sector históricamente dependiente de tecnologías propietarias.