El Día Mundial de la Copia de Seguridad, que se celebra cada 31 de marzo, cobra mayor relevancia en un momento en que la media de ciberataques semanales por empresa a escala global crece un 44% interanual, según el último informe de Check Point Software. Los escenarios de ataque incluyen ransomware, hacktivismo, incidencias en la cadena de suministro de terceros, phishing, intrusiones de red y filtraciones de datos, entre otros.
En este contexto, la mera existencia de copias de seguridad se revela insuficiente. Además de resguardar la información, las empresas deben priorizar la resiliencia de sus copias de seguridad, contemplando un plan de recuperación que les garantice una restauración efectiva y rápida ante posibles incidentes.
La relevancia de las copias de seguridad en un entorno amenazador
Las últimas publicaciones de Statista estiman que las filtraciones de datos en 2023 afectaron a más de 353 millones de personas en Estados Unidos, comprometiendo sectores como el sanitario, financiero, educativo o gubernamental. El ransomware, por su parte, ha pasado a ser un negocio sofisticado, en el que los atacantes cifran sistemas y destruyen repositorios de copias de seguridad.
La adopción de plataformas en la nube y aplicaciones SaaS añade otro factor: muchas organizaciones dan por sentado que servicios como Microsoft 365 o Google Workspace ofrecen una protección completa, cuando su cobertura real de retención y recuperación puede ser limitada. Del mismo modo, el trabajo híbrido amplía la superficie de riesgo, haciendo necesarios planes de recuperación más robustos y roles claramente definidos para cualquier contingencia.
Más allá de la copia de seguridad: resiliencia digital
Proteger datos y aplicaciones no consiste únicamente en almacenarlos de forma duplicada. La seguridad abarca un enfoque integral que combina tecnología, políticas de gobierno del dato y cultura de prevención. Según Check Point, los ejes son:
- Copias de seguridad inmutables y cifradas, con autenticación multifactor.
- Almacenamiento aislado para proteger frente a manipulaciones.
- Uso de herramientas nativas en la nube y test automatizados de restauración.
- Integración con sistemas de detección de amenazas para alertar en caso de manipulación.
- Redundancia geográfica para reforzar tanto la continuidad operativa como la conformidad normativa.
En cuanto al factor humano -uno de los mayores responsables de las brechas- se propone atribuir funciones claras, enseñar a los empleados cuál es el alcance de la copia de seguridad, realizar simulacros de restauración y revisar los planes de contingencia trimestralmente.
Una visión estratégica en la dirección
La recomendación de Check Point subraya la necesidad de concebir las copias de seguridad como un aspecto esencial para la continuidad operativa y la resiliencia, no solo como un recurso técnico adicional.
En este sentido, Eusebio Nieva, director técnico de la compañía para España y Portugal, insta a las organizaciones a tratar la recuperación de datos como un objetivo a nivel directivo, garantizando así la capacidad de respuesta ante el auge de los ciberataques.