Según Jaume R. Palau, CEO y cofundador de cdmon, nos encontramos ante el comienzo de una segunda irrupción de Internet, impulsada en esta ocasión por la inteligencia artificial. El directivo afirma que la IA permitirá a empresas de cualquier tamaño escalar y competir con grandes consultoras, ya que la automatización de procesos de programación y desarrollo de software democratizará el acceso a la tecnología.
Uno de los primeros elementos que ha resaltado ha sido la escalabilidad de los negocios: “pequeñas empresas, incluso individuales, van a poder operar como si fueran grandes consultoras, ya que la IA permitirá democratizar el acceso a nuevas tecnologías. También se van a evitar muchos procesos que antes eran necesarios para crear programas o aplicaciones”. Sin embargo, este escenario —advierte— “tiene una doble cara”.
Inteligencia Artificial diseñada para ciberataques
Aunque Palau celebra que “habrá un salto de gigante en la innovación informática, el escenario futuro no será idílico”. El directivo explica que “debido a que será mucho más barato desarrollar software, también es posible que haya personas o entidades con malas intenciones que saquen partido de los algoritmos para crear nuevos virus. También, que se exprima el potencial de la IA para lanzar ataques cibernéticos más sofisticados. Tenemos que estar preparados para hacer frente a inteligencias artificiales programadas para atacar”.
No obstante, Palau también ha destacado que ya hay varios tipos de ataques cibernéticos que suponen un riesgo en la actualidad, que pueden ser “una bomba si se juntan con IA”.
“El phishing es capaz de suplantar identidades de una manera muy sofisticada. Imaginemos lo que puede pasar si se alimenta con algoritmos que hablan, que simulan patrones de pensamiento o que entiende las emociones. Cualquier ciberdelincuente podría programar una de este tipo con datos sensibles de diferente índole, obteniéndolos de lugares como las redes sociales”, ha explicado.
¿Cómo hacer frente a este nuevo riesgo?
Ante este escenario en el que los algoritmos abren nuevos desafíos para la seguridad en la red, el cofundador de cdmon ha afirmado que “prohibir la IA no es una solución, puesto que ya hemos abierto una caja de Pandora que no se puede cerrar”.
“Es sumamente importante invertir en esfuerzos en dos frentes: formación y concienciación. A su vez, se han de implicar todos los actores sociales: medios de comunicación, escuelas, gobiernos, instituciones y centros de investigación. Los primeros han de formar en la alfabetización de cómo enfrentar posibles estafas creadas con IA. Los últimos han de investigar y desarrollar nuevos mecanismos de defensa de los modelos de lenguaje, porque será una de las tecnologías fundamentales que necesitaremos en un futuro”, ha concluido.