El PDF, un nuevo reto para la seguridad del correo electrónico

Check Point Research advierte del uso cada vez más sofisticado de los archivos PDF como vector de ataque, señalando que el 68% de los ciberataques comienza en la bandeja de entrada y el 22% se esconde tras este formato.
4 de abril, 2025

En el último año, se han abierto más de 400.000 millones de archivos PDF y se han editado 16.000 millones de documentos en herramientas populares como Adobe Acrobat. Esta elevada frecuencia de uso, unida a la confianza que despierta el formato en empresas de todo tipo, lo han convertido en un canal propicio para que los ciberdelincuentes oculten enlaces maliciosos y eludan los filtros de seguridad tradicionales.

Según datos recopilados por Check Point Research, el 68% de los ciberataques se inicia por correo electrónico, y un 22% de los archivos adjuntos de carácter malicioso proviene de documentos en PDF. Esta situación se ve agravada por la detección cada vez más tardía de este tipo de amenazas, que a menudo pasan desapercibidas para los proveedores de seguridad, llegando a permanecer meses en circulación sin ser identificadas.

Por otra parte, el uso de contramedidas sofisticadas complica la intervención de herramientas de seguridad. Se han observado técnicas que aprovechan códigos QR incrustados, enlaces alojados en servicios legítimos como Google o LinkedIn para sortear filtros, o combinaciones de codificaciones complejas que impiden el análisis estático de los archivos. Así mismo, hay ataques que simulan la identidad de marcas reconocidas con el fin de inducir a los usuarios a interactuar, desencadenando la infección o el robo de credenciales.

Riesgos crecientes y medidas de prevención

Este panorama plantea un claro riesgo empresarial, pues muchos de los ciberataques que usan PDFs se valen de la interacción humana para activarse. Mientras persista la confianza en este tipo de documentos, quienes los gestionan necesitan reforzar sus medidas de protección.

Soluciones como Threat Emulation y Harmony Endpoint, promovidas por Check Point Software, aspiran a abordar estas tácticas de ataque, detectando potenciales amenazas en múltiples tipos de archivos y entornos operativos.

Para intentar mitigar las intrusiones, resulta recomendable verificar el origen de los correos y desconfiar de archivos adjuntos que pidan, sin mayor explicación, hacer clic en enlaces o escanear códigos desde un dispositivo móvil. Se insta a mantener los sistemas de lectura y las defensas actualizadas, y a desactivar funciones como JavaScript en el visor de PDF si no es imprescindible. Además, conviene analizar la URL completa antes de acceder y prestar atención a señales de alerta, como direcciones de correo poco habituales o el uso de un lenguaje que no se corresponde con la comunicación esperada.

La trascendencia de esta problemática radica en que, por su popularidad, los archivos PDF constituyen un vehículo perfecto para difundir vínculos dañinos. Ante ello, la prevención pasa por supervisar cada archivo en tiempo real, con mecanismos capaces de adelantarse a las amenazas y actuar antes de que estas alcancen la bandeja de entrada del usuario.