A medida que la inteligencia artificial redefine el entorno laboral, el 46% de los trabajadores teme que sus habilidades puedan quedar obsoletas en cinco años, y el 29% prevé que esto ocurra incluso antes, según un estudio de Kahoot!, la plataforma global de aprendizaje.

Este dato subraya la necesidad de soluciones de aprendizaje adaptativas y atractivas para que los empleados mantengan su competitividad en un mercado en rápida transformación. Sin embargo, la falta de tiempo y la escasa personalización de los programas de formación son obstáculos que afectan a casi la mitad de los empleados, quienes consideran que la capacitación actual es poco atractiva y difícil de encajar en sus rutinas laborales.

Obstáculos para la mejora de cualificaciones

La falta de tiempo es el principal desafío para la mejora de competencias, con un 47% de los empleados que encuentra difícil compaginar el aprendizaje con sus obligaciones diarias. Además, el 49% señala que las demandas laborales suelen tener prioridad sobre la formación, lo que limita el desarrollo profesional.

Como resultado, los empleados se enfrentan a una presión significativa: el 74% se siente fatigado y el 34% completamente agotado por su carga de trabajo. Esta situación se agrava con la constante necesidad de aprendizaje, que un tercio de los empleados considera abrumadora para seguir siendo eficaces en sus roles.

El estudio también revela que el cambio frecuente de tareas afecta a la concentración, y que el 47% de los trabajadores reclama opciones de aprendizaje más flexibles, como microaprendizaje o tiempo de formación integrado en la jornada laboral. Aunque el “trabajo en profundidad” –atención sostenida a tareas cognitivamente exigentes– se ha popularizado en otros ámbitos laborales, rara vez se aplica a la mejora de cualificaciones, lo que indica la necesidad de entornos enfocados que permitan el desarrollo profesional sin distracciones.

Programas de formación desconectados de los objetivos profesionales

Solo un tercio de los empleados considera que la formación ofrecida por sus empresas se ajusta a sus objetivos profesionales, y el 36% afirma que carece de relevancia y aplicación práctica. Además, casi la mitad (46%) percibe que la formación es aburrida, y el 37% cree que se imparte de forma poco atractiva.

La falta de alineación de la capacitación con los objetivos profesionales es otro desafío: apenas el 11% de los empleados reporta que los programas de formación están personalizados según sus intereses, mientras que el 53% dice tener acceso limitado a mentores de formación, lo que limita las oportunidades de aprendizaje autónomo y de apoyo entre compañeros.

Reconocimiento limitado y sus efectos en la motivación

A pesar de los esfuerzos de los empleados por mejorar sus competencias, casi el 46% asegura que su aprendizaje no es reconocido ni recompensado por sus empresas, lo que afecta su motivación; el 90% de los encuestados sostiene que estaría más dispuesto a mejorar sus cualificaciones si se reconocieran sus esfuerzos de aprendizaje.

La falta de reconocimiento varía según departamentos: el 69% de los trabajadores de TI se siente valorado por su aprendizaje, mientras que solo el 39% de los empleados de operaciones comparte esta percepción. Asimismo, los hombres son más propensos que las mujeres a sentirse reconocidos, lo que indica disparidades en la valoración de logros de aprendizaje en la plantilla.

Una llamada a la actualización de los programas de formación

Según Eilert Hanoa, CEO de Kahoot!, en un contexto en el que la tecnología y la IA están cambiando el mercado laboral, es crucial que las empresas proporcionen programas de formación atractivos y relevantes, profundamente integrados en la cultura corporativa. Este momento representa una oportunidad para que las organizaciones ajusten su enfoque de capacitación para apoyar el crecimiento y la retención del talento en un entorno donde la actualización de habilidades es esencial.