Las demandas de flexibilidad y conciliación continúan ganando fuerza entre los profesionales en España, a la vez que se mantiene el salario como primer incentivo a la hora de elegir un empleo. De acuerdo con datos presentados por SD Worx, cuatro de cada diez españoles valoran la flexibilidad horaria por encima de disponer de más días libres, un 42% del total, solo por detrás de la retribución económica (53%).
Los datos sugieren que la semana laboral de 4 días (sin merma de ingresos) se ha consolidado como una segunda opción bien valorada por dos de cada tres españoles (66%). Además, un 35% de los encuestados destaca la flexibilidad de horarios como uno de los motivos fundamentales para decantarse por una empresa.
Por otro lado, las compañías nacionales se centran en el horario diario flexible (41%), el teletrabajo (37,6%) y los horarios variables (32,1%) como principales fórmulas de flexibilidad, en ocasiones distanciadas de las preferencias de sus empleados.
Carga de trabajo y horas extra
En este escenario, la conciliación se enfrenta al hecho de que casi el 38% de los españoles realiza horas extraordinarias con frecuencia, según el estudio “Guía de Gestión del Tiempo”, de SD Worx, con más de 1.300 participantes en España y un total de 23.000 en 18 países europeos. La mayoría de estas horas extra responde a la elevada carga de trabajo (41%), seguida de imprevistos y plazos estrictos (ambos con el 30%).
Esta situación también pone de relieve la necesidad de una mejor planificación en las organizaciones, ya que motivos como la búsqueda de ingresos adicionales (27%) se sitúan por debajo de las causas relacionadas con la organización del trabajo.
Soluciones a través de los sistemas de registro de tiempo
Para afrontar estos retos, los sistemas de registro del tiempo emergen como herramientas fundamentales, ofreciendo ventajas como planificación más eficaz (37%), cumplimiento normativo mejorado (34%) y una visión clara de la disponibilidad del personal (31%). Su uso puede reducir en un 24% el tiempo invertido en gestiones administrativas, facilitando una asignación más eficiente de los recursos.
En el caso español, un 70% de las empresas ya emplea estos sistemas, el tercer país en Europa que más los utiliza, frente a una media europea del 56,5%. Desde el punto de vista de los trabajadores, uno de cada tres considera que estas herramientas ayudan a equilibrar la vida personal y laboral, al proporcionarles información detallada sobre su jornada y fomentar acuerdos de trabajo más flexibles.